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El FC Barcelona seguirá compitiendo a nivel nacional, el ballet, pendiente

 

El pasado mes de junio, informábamos que, por motivos presupuestarios, la sección de patinaje del FC Barcelona limitaría a Catalunya el ámbito de sus competiciones lo que, lógicamente, dificultaba su viabilidad y sus planes de futuro. Pues bien, esta circunstancia ha cambiado y, desde hace algún tiempo, se sabe que ha habido acuerdo entre las partes (la sección y el club), lo que equivale a que se han encontrado los fondos económicos necesarios y, afortunadamente, el FC Barcelona seguirá compitiendo, tanto a nivel catalán, como nacional, al igual que ha venido realizando hasta ahora.   Según nos ha comentado el club, debido al recorte presupuestario efectuado en las secciones no profesionales, “puede ser que alguno de los deportistas (patinadores) no puedan pagarse los desplazamientos”. A este respecto añaden que “en el resto de clubes que hay en España, además de pagar cuota mensual, los deportistas corren con el gasto de los desplazamientos a distintas competiciones”. 
  Más dudosa parece la continuidad de la disciplina de ballet sobre hielo, en la que el FC Barcelona es Campeona del Mundo y en la que, a pesar de no ser una categoría reconocida por la ISU, el club competía desde hace siete años y contaba con dos formaciones. Según fuentes del FC Barcelona, la continuidad del ballet está “pendiente de la decisión del entrenador (Patrick Capmartin) y todavía se desconoce si habrá uno o dos equipos”.   Aprovecho para hacer un comentario que, espero, no siente mal. Cuando las cosas, como se dice popularmente “se pusieron feas”, muchas personas de la sección de patinaje del FC Barcelona protestaron y alzaron sus voces pero, cuando se solucionaron, nadie dijo ni media palabra. Aunque esta decisión tiene su sentido – no todos los deportes afectados han corrido la misma suerte y no es cuestión de alardear – moralmente sí se debía de haber comunicado.  

Dicho esto, mucha suerte a los patinadores y entrenadores del FC Barcelona.

Victor Bustamante, 14º en el JGP de Austria

  Víctor Bustamante ha finalizado en el puesto décimo cuarto del Junior Grand Prix de Austria que se ha disputado en la ciudad de Innsbruck. Víctor ha perdido una posición con respecto al programa corto, pero ha presentado un libre que, si bien ha tenido algunos fallos (varios saltos dobles y algún triple inclinado adelante) tenía bastante dificultad. Por este, motivo ha logrado un importante aumento de su marca del programa largo pasando de 69.55 puntos en el JGP de Courchevel a 85.72, si bien él ya en las FOJE había logrado 77.10.   En su libre de “Espartaco” de Katchaturiam no incluyó el triple lutz como en el corto. Abrió con el triple flip que, algo apresurado en el gesto técnico, dejó en un doble (GOE 0). Unos instantes después lograba la combinación 3 bucle + 2 metz (GOE 0). En el metz, le pasada exactamente lo mismo que en el flip y lo dejaba en doble (GOE 0) para, después, lograr la combinación 3 salchow + 2 metz + 2metz (GOE 0). La primera de las piruetas fue una difícil y original pirueta saltada a posición vertical de nivel 3 en la que, al girar bastante fuera de eje en algunos momentos, recibió algunas penalizaciones (GOE -1). El segundo intento de triple bucle se quedaba en simple (GOE 0) pero se reponía al lograr de manera consecutiva dos 2 axel, el segundo combinado con 2 metz (ambos GOE 0). Su último salto, el 3 salchow, estuvo algo inclinado hacia la parte delantera (GOE -1). La pirueta baja cambiada estuvo bien ejecutada (GOE +1) pero perdió un nivel de dificultad y se quedó en 2. Por su parte, la serie de pasos en círculo de nivel 2 estuvo bastante limpia (GOE 0) y cerró con una buena pirueta combinada de nivel 3 (GOE 3). Recordemos que, cuando se deja un triple en doble limpio, se logran menos puntos de nivel de base, pero no penaliza la ejecución. Por este motivo, aunque no logró todos los triples deseados, no  perdió muchos puntos.   En componentes del programa logró 45.22, que es una marca importante para un patinador júnior. Es un patinador bastante elegante. Esto se notó mucho en la segunda parte de programa porque, en la primera, era un ir y venir de saltos y cruzados. En mi opinión, le faltaba coreografía y transiciones a esta primera sección.   Aunque, a priori, puede parecer un resultado no muy brillante, ha sido una muy buena participación y, sobre todo, carta de credenciales de cara a su selección para el Campeonato del Mundo Júnior.

Alexandra Rodríguez y Aritz Maestu acaban en el puesto 17 del JGP de Austria

  Muy orgullosos deben de sentirse Alexandra Rodríguez, Aritz Maesu y sus entrenadores Miguel Alegre y Emma Baxter con su debut internacional. Han finalizado en el puesto 17º - la misma plaza que en el programa corto - del JGP de Austria con un total de 90.97 puntos, de los cuales 59.56 los lograron el programa libre. Un resultado muy respetable. Sobre todo teniendo en cuenta que, en el libre, han batido a la pareja austriaca, que fue 15ª en el europeo y 21ª en el mundial sénior.   En su programa libre con la música del “Fantasma de la Ópera” se les ha visto fluir y disfrutar, algo muy complicado en estas circunstancias. Abrían con el doble flip paralelo, salto muy correctamente ejecutado (GOE 0) al que precedía el doble twist nivel 1 algo defectuoso de recogida al igual que en el corto (GOE -1). Posteriormente, realizaban la pirueta en paralelo que, en este caso, era un flying camel de nivel 3 donde giraban bien sincronizados, pero muy muy separados de ahí las penalizaciones (GOE -1). La verdad es que, para ser una pareja tan jovencita, el nivel de sincronía en su patinaje es realmente notable. El doble bucle lanzado fue correcto (GOE 0). La inexperiencia les pasó factura en la serie coreográfica de ángeles donde, al no aguantar el tiempo suficiente la primera posición, no les contó el elemento. El primero de sus dos elevados fue un lazo cambiado a vértigo un ángel de nivel 1. Se trata de un elemento nuevo para ellos. El cambio no fue del todo preciso y los jueces lo penalizaron (GOE -1) El fallo más destacado vino en la combinación de doble bucle con doble bucle en paralelo, donde Alexandra se comió algo de vuelta en el segundo  (GOE -2). También justito estuvo el doble flip lanzado (GOE -1). Espiral interior atrás nivel 1 estuvo muy limpia (GOE 0). En el elevado final, vértigo en ángel con variación a cogido, la variación fue más larga que en el corto por eso aguantaron el nivel 2 pero el levantamiento era técnicamente algo incorrecto (GOE -1). Cerraron con la pirueta en pareja nivel 1 con alguna imprecisión en el cambio de pie (GOE -1).   Coreográficamente, el programa es mucho más rico que el corto. Las posiciones artísticas, sobre todos las de los brazos, están más trabajadas y marcadas, lo que ayuda a lucir mucho más el programa, en comunión con la música y los trajes. Únicamente, apuntaría que el final debe estar más definido. Y es cuando se acaba con una pirueta y, el final no es marcado, si el elemento se acaba antes de tiempo (por lo que sea) sobra música y la apoteosis final queda algo deslucida. Esto se nota mucho en patinadores jóvenes porque no tienen la picardía para improvisar y llenar música.       Habrá quien vea el vaso medio vacío, que si los programas tienen poca dificultad, que si hay elementos ejecutados así, así, pero yo prefiero verlo medio lleno sobre todo porque soy consciente de lo que conlleva competir en parejas que, aunque sea un poco la hermana pobre de las otras categorías, es la más difícil y con diferencia (aunque también la más fácil para subir en ranking por la falta de competidores). El nivel que tienen es muy aceptable, sobre todo por el poco background técnico previo que atesoran y de aquí todo es mejorar. En un par de semanas les veremos el Tallin y, en unos meses, en Minsk en el mundial júnior. Toda la suerte del mundo para ellos, que están logrando lo que otros no pudimos: representar a España en categoría de parejas. Algo impensable hace sólo un par de años. Y es que como dice Javier Fernández – que siempre tiene mentalidad de equipo (no como algunos) – And Spain Keep growing (y España continúa creciendo).

Víctor Bustamente, 13º en Innsbruck con marca personal

  Esta temporada viene con el objetivo de ser convocado para el Campeonato del Mundo Júnior de Minsk y, lo cierto es que, en un breve espacio de tiempo, Víctor Bustamante ha crecido mucho como patinador. Esta tarde, tenía la difícil papeleta de inaugurar el programa corto en la categoría masculina del Junior Grand Prix de Austria y ha pasado el examen con nota: décimo tercero y marca personal (46.56 puntos). Lo más cerca que había estado anteriormente de este registro fue en el Campeonato de Madrid de este año con 43.96.   Aunque ha tenido un par de fallos, la verdad, es que ha presentado un programa muy maduro repleto de dificultades, tanto en saltos, como en piruetas. Abría su corto con el triple lutz con pasos en el que peso se le iba atrás, lo que le hizo sobregirar el salto y apoyar el pie libre (GOE -3), un elemento (que aunque estaba un poco cambiado de filo) ya son palabras mayores. Acto seguido clavaba la combinación 3 bucle con 2 metz (GOE 0). Posteriormente, tardó en abrir el 2 axel, lo que provocó de nuevo sobregirar el salto y, aunque lo aguantó en un pie, lo estacionó con un doble tres (GOE -1). Instantes posteriores eealizó una difícil pirueta cambiada en ángel de nivel 3, rara de ver, que comenzaba en exterior e incluía una variación cogida en interior. Igual de espectacular fue la saltada baja en un mismo pie con variación de baja lateral con cambio de filo (nivel 3). A continuación realizó una serie de pasos de nivel 2 muy correcta para cerrar con la pirueta combinada de  nivel 3. La verdad es que Víctor defendió muy bien las piruetas, tanto en valor de base, como en ejecución.   Un programa muy solemne con la música del Pagliacci de Leoncavallo obra de Iván Sáez. Hay que tener mucho patinaje para aguantar así de bien una música tan madura. Ha estado un poco menos expresivo que de costumbre, pero daba la sensación de ir realmente concentrado para acometer esos elementos tan difíciles.   Desde aquí felicitarle tanto a él, como a Iván, Carolina y Jordi porque el trabajo que han realizado es excepcional y han logrado un patinador de una estupenda calidad técnica y artística.

Alexandra Rodríguez y Aritz Maestu, 17º en su debut internacional

 

En el deporte hay un dicho y es “quien da todo lo que tiene, no se le puede pedir más”. Y eso es lo que ha pasado hoy con Alexandra Rodríguez y Aritz Maestu en el programa corto del Júnior Grand Prix de Innsbruck (Austria) y que era su debut a nivel internacional. Sin duda, un día que no olvidarán. Han finalizado en el puesto 17º con un total de 31.44 puntos lo que, lógicamente, ha supuesto su marca personal. Han superado a tres parejas de las veinte participantes. La verdad es que, aunque el programa tenía bastante poquita dificultad – todos los elementos fueron de nivel 1 – y la mayoría de ellos fueron realizados de manera un poco sucia, para el poco tiempo que llevan, la actuación fue más que digna.   Comenzaron con el doble twist un poquito incorrecto de caída (GOE -1), pero muchísimo mejor que otras veces. El salto lanzado, doble bucle, estuvo muy limpio y muy bonito de caída (GOE 0), lo que provocó los aplausos del público austriaco. Para el elevado optaron por un vértigo en ángel – o como llaman los anglosajones: star lift – con variación a cogido. Aunque la variación estuvo imprecisa de forma y corta de duración (de ahí el GOE -1), el elemento en global no estuvo mal. La espiral de la muerte interior atrás con cambio de mano estuvo un poco imprecisa de alzado (GOE -1). El fallo más grave vino en el 2 lutz paralelo, donde a Alexandra le faltó un cuarto de vuelta y lo realizó en filo interior, lo que provocó GOEs de -2. La pirueta en pareja tuvo poquita velocidad y algún momento de duda (GOE -1). Cerraron el programa con la serie de pasos, donde optaron por un patrón asimétrico en el que Aritz, incluso realizó un butterfly (GOE 0). Los pasos estaban justitos en cuanto a calidad y desplazamiento, pero el elemento era bastante interesante.   En mi opinión, el programa tenía poca coreografía y algunos elementos, como el canadiense abierto del principio y el arrastrón después del lanzado, representan un patinaje demasiado básico y desfasado en el tiempo. Me ha gustado ver cómo han mejorado el final porque, anteriormente, tenía huecos coreográficos. Además, ha habido momento donde han sonreído y han intentado transmitir, lo que es de valorar.  

Lo dicho, ellos contentos y nosotros también. Mucha suerte para el libre.